Los injertos de pelo son una cirugía bastante peculiar. Sus clientes normalmente, llegan a esta solución de forma desesperada, de forma que quieren solucionar como sea y cuanto antes su problema capilar. Estas situaciones son carne de cañón para estafadores, o para personas y empresas que lo que buscan es aprovecharse de la voluntad y los deseos de las personas.
Es por eso que hay que tener mucho cuidado con los profesionales en los que confiamos para estas intervenciones. En los últimos años, hay un claro ejemplo de una localidad en la que este negocio se ha hecho prácticamente viral, Turquía.
Miles de personas al año eligen este destino para sus trasplantes capilares, sin tener en cuenta los riesgos de un trasplante capilar en Turquía. Vamos a ver lo que se esconde tras esta situación.
¿CIRUGIA O VACACIONES?
A muchos les parecerá una pregunta extraña, pero vamos a ver el sentido real que tiene. Los trasplantes de pelo en Turquía, no se plantean como una cirugía o como una intervención capilar con un profesional, sino que se plantean como unas vacaciones, un paquete de desconexión en el que prometen a sus clientes que volverán renovados, con la autoestima recargada y su nueva melena.
Nada más lejos de la realidad. Lo que sucede en estas ocasiones es que la euforia y la ilusión de muchos pacientes, los lleva a obnubilarse con todas estas promesas de hoteles, spas, restaurantes, etc, y se olvidan de lo más importante, de que lo que necesitaban era un injerto de pelo.
Esto es lo que les ha ocurrido a cientos de personas durante los últimos años, que se han vuelto con unas buenas vacaciones, pero con unas pésimas opiniones de injertos de pelo en Turquía.
Son los mismos profesionales de la zona los que explican cuál es el problema
MERITO VS SENSACIONALISMO
Todos sabemos de sobra que los mensajes populistas son los que más acaban calando en la mayoría de las personas, y en estos casos, no iba a ser menos.
Cuando se acude a Turquía para realizarse un trasplante capilar, la mayoría de sus clientes han sido captados a través de campañas de publicidad, pero publicidad sobre la experiencia que vas a pasar en Turquía, ya que no hay apenas publicidad sobre los buenos resultados que se obtienen, o sobre las opiniones del trasplante capilar en Turquía.
Esto genera problemas para dos partes:
- Pacientes. Los primeros afectados son los pacientes evidentemente, ya que son a los que se les consigue sacar el dinero, a cambio de unas vacaciones de las que obtienen un injerto de pelo de muy baja calidad.
- Profesionales. Aunque parezca que no, los profesionales de Turquía también se ven afectados por esta situación, ya que realmente también hay algunos buenos profesionales, que tienen que lidiar continuamente con una mala fama y blogs enteros hablando sobre por qué no hacerse un injerto de pelo en Turquía.
Por lo tanto, la conclusión que podemos extraer es que aunque sigue siendo una buena opción en algunos casos, es necesario informarse con antelación de los posibles riesgos de un trasplante capilar en Turquía, así como de las opiniones de los cirujanos en concreto en los que vamos a confiar para hacernos nuestro injerto de pelo.
Al final, por el presupuesto que se necesita para el paquete entero de un injerto en Turquía, podemos encontrar profesionales mucho más cerca, con una experiencia y calidad tangibles, y sin el riesgo de que nos intenten estafar con unas vacaciones.